martes, 4 de junio de 2013

Trans Montesblancos Trail 50

Este sábado pasado nos fuimos a correr la Trans Montesblancos Trail  en la Puebla de Alfindén (Zaragoza), desarrollándose todo por la zona de los Monegros, un paisaje semi-desértico. Stefan fue el año pasado y a pesar de no poder haberla completado, sí quedó bastante sorprendido de la organización y la carrera, por lo que nos apuntamos este año nada más salir el plazo de inscripción.


Y así hicimos, salimos de Valencia sobre las 7 de la mañana y en algo más de 3h llegamos a la población. Como todavía era pronto, había poca gente y estaban montando toda la salida y zona de carrera. Nosotros recogimos el dorsal y nos dispusimos a comer tranquilamente, ya que la carrera salía a las 13h. La temperatura si bien no ser alta, debido al fuerte viento de Cierzo, sí se notaba en la piel como el Sol quemaba. Tras comer, fuimos a cambiarnos y prepararnos para la salida y apenas a 20m de la salida ya nos metimos dentro del área de control de la carrera, a esperar que esta se produjese. Como en la salida decidimos ir cada uno a su estrategía y forma de correr pues relataremos por separado como fue la aventura de ambos:

Juan Carlos:
La verdad es que la carrera me tenía algo intrigado, ya que este tipo de carreras "tan corribles" y sin avituallamientos sólidos no se me dan bien, ya que me ciego a correr y se me olvida comer y beber hasta que al final exploto (me va mejor carreras con más desnivel, donde se camina más y hay solido en los avitus), y como no, está tampoco iba a ser una excepción. La salida unos minutos pasados de las 13h se produce rápida. Como no exigían mucho material (algo de comida, móvil y depósito de agua) me noto muy ligero, este año he intentado mejorar velocidad y la verdad es que me encontraba cómodo.


Sin quererlo y sin apenas esfuerzo debo calcular que me encuentro sobre el puesto 20-25 de la carrera sin quererlo ni beberlo. Al ser todo camino y pista se puede correr fácil y los desniveles, salvo momentos puntuales, no son excesivos, aunque eso sí, a la larga desgastarán porque son bastante contínuos. Rápidamente llego al kilómetro 8 en unos 42 minutos, voy demasiado deprisa pienso, pero no me cuesta mucho llevar el ritmo que he adoptado y así sigo. No tengo nada de hambre, al revés, me noto algo hinchado (creo que comí bastante antes de salir también) y de momento sed no tengo, aunque el aire seco se que deshidrata más de lo que uno cree.


De nuevo me encuentro en un avitu del kilómetro 15 que se llega tras una larga y constante subida. Aquí para un poco a estirar mis piernas y bebo dos sorbos de agua, no me hace falta ni recargar los bidones. Tras la pausa, el terreno es en tendencia descendente otra vez hasta la salida completándose así un bucle. Aquí me encuentro fenomenal, y bajando le pego por fin dos bocados a una barrita, pero no tengo hambre y encima me compré por error el modelo más "seco" de estas barritas por lo que parece que estoy comiendo tierra, al menos me servirá para beber algo. A buen ritmo llego al kilómetro 25 en poco más de 2:08...muy rápido para lo que pensaba, pero que leches me encuentro fuerte. Aquí bebo algo más y recargo bidones y de nuevo a la marcha, a por el segundo bucle. En el cruce de caminos me encuentro a Stefan que baja también rápido, más o menos estará 2-3km por detras y unos 20 minutos de tiempo, se le ve fresco y con buena marcha. Yo sigo corriendo porque el cuerpo me responde, y eso que para mí esta era la sección más dura y engañosa, prácticamente 9 kilómetros en constante subida corrible, pero me voy manteniendo...sin embargo, más o menos sobre el kilómetro 34 comienzo a tener algo de dolor de estómago, no he comido nada y no tengo hambre, pero de golpe me empiezan a doler más las piernas, menos mal que en poco aparece otro avitu donde me tomo un gel y agua y estiro un poco. Salgo de ahí en tendencia bajada, pero no me encuentro bien y aunque corro, la cabeza me puede y creo que voy lento, el calor me invade y poco a poco cada vez de vez en cuando me dan algunas arcadas, pero no vómito. Se me hace muy largo y más cuando en el kilómetro 40 viene la sección más
complicada de cresteo por pequeñas colinas por senda, aquí llego en algo menos de 4h. Al menos, aquí se tiene que andar y viene bien para parar y cambiar el gesto de correr por el de andar. Aquí parece que me recupero algo, pero no...en la última subida antes del avitu tengo que parar por las arcadas que me dan, pero nada, no vomito, tengo agonía y me arrastro hasta el control del 44km.



Aquí pido una botella y me siento, intento beber y ver si me entran ganas de comer, pero nada, ni siquiera un gel...sin embargo pensar que me quedan 6km me hace salir convencido de un poco de sufrimiento y ya está...y que sufrimiento, un largo camino recto con subidas y bajadas y un fuerte viento de cierzo me matan, intento correr, pero al rato camino, me recupero, corro pero no me da para mucho y vuelvo a caminar...se me hace interminable, nunca llega el último kilómetro y cuando llega estoy en el pueblo pero nos meten por el interior y voy tan roto que hasta ese último kilómetro me toca andar un
pedazo...al final, saco fuerzas de flaqueza para entrar en meta trotando y ser finisher en 5:13,47. Uff, al parar me dolían todas las piernas como nunca, aun teniendo consumiciones pido un agua que no puedo ni abrir, no me entra nada, me siento a ver si puedo esperar a Stefan pero me duele todo y de nuevo arcadas...subo a ducharme y no puedo estar ni sentado ni de pie, dolor...y más arcadas, hasta que al final voy al W.C. y pude vomitar, que fuerte!. Me ducho a duras penas por el dolor de todo, y todavía sin beber ni comer...quiero salir a esperar a Stefan pero no puedo estar de pie, me voy a una grada a tumbarme y ver por fin si tengo ganas de beber y comer, pero no...poco a poco al menos el dolor
de piernas desaparece y en ese momento entre Stefan en meta y yo le envío un mensaje diciéndole donde estoy. Lleva dos coca-colas y me da una, que por fin, me la tomo...me sienta como algo divino y mientras se ducha, milagrosamente me recupero, no me duele nada, empiezo a tener hambre y ya estoy listo para conducir sin molestias ni dolores...en definitiva, tengo que aprender a comer y beber en este tipo de carreras, no es la primera vez que me pasa, y me temo que tampoco la última...sabiendo que puedo dar más de sí si llegara a controlar esto, pero siempre me vence.

Stefan:
Tenia muchas ganas de volver a la TMT, ya que el año pasado abandoné en el KM28, y encima por razones no justificables conmigo mismo (Crónica del año pasado). Este año me acerco con otra filosofía, la de centrarme en acabar y no preocuparme del ritmo de los otros. Y como plan de contingencia me llevo a Juan Carlos, que en caso de oir la palabra "abandonar" suele repartir patadas en el culo. ;-)

En la salida lo ultimo que escucho de J.C. es: "Uf, hoy no me apetece nada correr! Me lo voy a tomar con calma." Y con eso sale como una flecha y no le vuelvo a ver hasta el cruce a mitad de carrera cuando me lleva ya casi media hora de ventaja. Los ingleses llaman "sandbaging" a esta técnica de hacer sentirse seguro a la competencia ;-)

Nada, yo a mi ritmo, con el plan de siempre de ir constante, sin perder tiempo en paradas innecesarias y ser eficiente en los avituallamientos. En cambio al año pasado la temperatura es aceptable, pero hace mucho aire. Claro, por eso la temperatura es acceptable, no se puede  tener todo ;-).

La carrera es rápida en el sentido de que casi todo el recorrido es corrible, aunque probablemente para alguien de mi nivel tomar algún descanso para andar en algunas de la subidas podría ser mas eficiente. De todos modos el terreno me invita a correr por encima de mis posibilidades y al final me dejará bastante destrozado. Pero por el momento voy bien, intento beber con cierta frecuencia, pero cuando llego al primer avituallamientos me queda suficiente agua para no parar. Llevo dos bidones de mano, estilo americano, que es algo que va muy bien en este tipo de carrera. Llevo varios geles y 3 barritas, el móvil (material obligatorio) y un pequeño kit de emergencias (tiritas, ibuprofeno y Imodium, que nunca se sabe) en los bolsillos del pantalón y así no necesito mochila. 

Cuando se acaba la hora y media me obligo a tragarme una barrita, cosa que no apetece con el calor y el ritmo que llevo. En el KM 16 mas o menos se encuentra el segundo avituallamiento. Me queda poca agua, pero como es todo bajada hasta el pueblo, decido no parar y ir rápido y ligero. En esa bajada me cruzo con la cabeza de la carrera por un tramo que está compartido con el segundo bucle. Poco después veo a J.C. que está volando. 



Entro en el pueblo (KM25) en unos 2h20m, cargo agua y salgo enseguida. Ahora empiezo a sufrir en la larga subida hasta el KM 34 mas o menos. Me obligo a comer otra barrita. Será la ultima, a partir de ahora geles, que entran mejor. En el siguiente control cargo agua, aunque me queda bastante, porque, según el briefing, el terreno se complica a partir del KM40. Y así es, aunque la complicación me viene bien. Llevo las piernas dolorosas, el estomago me está causando problemas y tener que concentrarme en una senda algo más técnica me distrae. En esta sección disfruto mucho, se va por crestas subiendo y bajando hasta el famoso toro, simbolo de la carrera y de alguna casa de vinos de jerez ;-). 

De ahí se va a Alfajarín y como curiosidad bonita se entra por medio del castillo.  Como tengo uno de estos subidones de energía inesperadas que solamente existen mas alla del KM42, voy tan encerrado en "la zona" que no me doy cuenta del control hasta que ya lo he pasado. Tengo que volver algunos metros, porque sí que necesito cargar agua. 



El resto del recorrido son unos 5km en paralelo a la autovia con el aire de frente. Como los "subidones post maraton" nunca duran mucho, me viene el bajón correspondiente y sufro bastante.    No me importa e incluso cuando me toca andar un poquito estoy feliz, ya que sé que la meta está cerca y esta vez sí que voy a acabar. A 2km de la meta un par de corredores me adelantan y consiguen despertar mi espirito competitivo. Estamos luchando por los puesto 50 y tanto y no tiene mucho sentido, pero a veces picarse con alguien es necesario para la motivación. Les sigo un ratito hasta que me decido y intento hacer un adelantamiento de estos que te dejan sin palabras y sin opciones de seguir. Acelero y doy las ultimas reservas que me quedan. No me siguen, bien! Probablemente, ni se han dado cuenta que estamos compitiendo, pero que narices, es una carrera! Una pequeña victoria absurda para mi, jejeje. Giramos para entrar en el pueblo y nada mas fuera de vista freno y recojo mis pulmones del suelo. 

Ya no queda nada, entro en meta, en 5h40m, un hombre feliz. Recojo mi camiseta (muy chula por cierto) y mi trofeo de finisher en forma de toro. Me felicitan Hector y después Alfonso, los directores de la carrera. Voy por una Coca Cola y busco a J.C. No le encuentro, pero me llega un mensaje diciendo que está vomitando en los servicios del pabellón, así que pido otra Coca Cola para él y voy a asegurarme que mi conductor vuelve a estar en condiciones para llevarme a casa ;-)



Conclusión conjunta:

Tras acabar ambos la carrera y despedirnos de los organizadores, nos toca la vuelta. No podemos quedarnos para que no se nos haga muy tarde nuestra vuelta, así que emprendemos marcha hacia Valencia, parando cuando nos entra hambre en Calamocha...donde daremos cuenta de un segundo ultra ;-)...ya hemos recuperado lo perdido delante de una buena mesa...un rato más de coche y en nuestras casitas a dormir tranquilos.


En definitiva, lo que más impresiona de la carrera es la atención y detalles de la organización, muy recomendable en este sentido y que hacen que el corredor solo tenga que preocuparse de correr, que no es poco. Enhorabuena a todos!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario