martes, 17 de diciembre de 2013

Crónica IV Carrera Sierra de Chiva 2013

Como cada año, la carrera de Chiva es uno de los clásicos que corremos. Aparte de ser el lugar en el que realizamos muchos de nuestros entrenamientos, es una carrera 10 en cuanto a organización y atención al corredor en la cual uno solamente se limita a disfrutar (y sufrir) de lo lindo.


Este año llegaba en un estado de forma muy muy bueno, que hacía posible acercarme al objetivo de estar sobre las 8h-8:30h si el día se daba bien. Sin embargo, justo a una semana vista unas molestias en la rodilla (de las cuales todavía no han desaparacido) me hacían temer por mi rendimiento como al final hicieron limitar algo mi rendimiento.

La "carrera" empezó el viernes, cuando fuimos a recoger el dorsal y allí encontramos con Daniel Hernando que venía de Madrid a correr esta carrera, y Stefan que a pesar de no poder correr sí quiso meterse en el ambiente. Tras la recogida de dorsal, nos fuimos a un pequeño bar a tomar unas cervezas y contarnos durante un buen rato nuestras batallas para ir "calentando" quedando en el lugar de salida para el día siguiente.

El sábado, tras un placentero sueño y un buen y copioso desayuno nos dirigimos hacía el lugar de salida junto con David Hungría, que es un otro de los llamados a hacer una gran carrera. La mañana es fría, sobre 0º por lo que la espera a la salida se hace larga por el fresquito que hace. Saludamos a más compañeros y mientras esperamos la salida comparto de nuevo charla con Daniel y David, dándoles los mejores ánimos ya que es una carrera que ellos pueden hacer muy bien.

Y puntualmente, a las 7am se da el pistoletazo de salida, que cada año se hace más rápida, como si la gente no fuese a correr 61km con 6000m de desnivel acumulado total. En este momento ya he perdido a Daniel y a David y yo cojo mi ritmo, alto para ser la carrera que es, pero es que me está pasando hasta el apuntador, así que me toca acelerar un poco para no perder un buen lugar antes de las primeras sendas. Justo tras salir del pueblo hay una pequeña rampa y aquí más de la mitad que han salido como un rayo se paran en seco y se ponen a caminar en grupos, obstaculizando a los que queremos correr un poco y tirando de zig-zag para adelantar. Parece que me he colocado en un buen sitio, calculo yo que sobre los 170 primeros (de unos 470 corredores).

La primera senda en subida se hace de noche, y a pesar del frío se aguanta bien. Además, la estampa es preciosa, el ver como todos los frontales van subiendo poco a poco la montaña. Es una imagen que a pesar de verla repetida en muchas carreras nunca uno se cansa de ver. Tras la subida comienza poco a poco a amanecer y comprobamos como el suelo está helado. No se el frío que hará a esta hora pero bajo cero seguro. Es por ello que se corre rápido para entrar en calor, llegando a la primera bajada por el camino de Cucala amaneciendo. Ya no hace falta el frontal, así que lo apagamos y bajamos a buena velocidad por la pista rota, pero con cuidado de no machacar ya mucho la musculatura ya que esta cuesta tiene bastante desnivel. En esto que pasamos el primer avituallamiento y nos encaramos a la senda de los Tramusales donde subimos ágilmente ya que las fuerzas están intactas y trotamos por la zona de falso-llano que empalma con la bajada de "Malos Pasos". En este bajada hay que tener algo de precaución, ya que hay piedra suelta y es fácil caer. De hecho un corredor se mete un buen leñazo y tienen que subir a por él para bajarle. Yo sigo muy bien y llegamos tras la bajada al segundo avituallamiento sobre 1:50h de carrera. Aquí paro a rellenar agua y comer un plátano y a guardar ropa de abrigo y quedarnos algo más frescos. Son unos minutos que pierdo y que voy a seguir pasando frío, pero merecerá la pena no ir tan acalorado.

Tras ello viene una subida que comienza a marcar ya las piernas, como es la del "Rincón de la Campana". Aquí ya empieza a hacer buena temperatura y como opté por quitarme ropa me viene muy bien y comienzo a pasar a gente que se quita el cortavientos. Esta subida tiene tramos duros, por lo que hay que regular. Aprovecho además en el final de la misma para comer una barrita consistente, ya que me he marcado en esta carrera mantener un buen ritmo de hidratación/alimentación. Tras la subida viene la rápida bajada de Bojet/Tabla cuarta en la cual me encuentro muy ágil y bajo rápido (mi asignatura pendiente) solo siendo adelantado por un par de chavales. A estas alturas me encuentro  muy bien y en poco más de 2:30h ya tengo 21km en el bolsillo, pero ahora se que debo regular todavía más, ya que viene la sección que realmente marca las diferencias en carrera, como es la subida a la cueva de Charnera y la posterior bajada machacona hasta la fuente de la Lándiga. Pero antes toca descender por el pedazo técnico de la Peña Señor, donde con el uso de cuerdas llegamos al interior del barranco por donde corremos un rato sorteando piedras e incluso ayudándonos con las manos, llegando posteriormente al avituallamiento. Compruebo que llevo agua suficiente para llegar hasta la fuente de la Lándiga por lo que no paro el ritmo y continúo por la senda de la Parra corriendo en las zonas más fáciles a buen ritmo.

La subida a la Cueva de Charnera es un clásico de esta Sierra, se trata de una subida corta pero con mucho desnivel donde incluso existen algunas cuerdas que nos ayudan a subir más fácil. Aquí ya comienzan a notarse los cuadriceps algo cargados, ya que esta es una carrera muy rápida y no se tiene tiempo para parar, acusando el cansancio poco a poco. Sin embargo, este año me encuentro bien y ligero y la subida la hago a un ritmo en el cual paso a bastante a gente, subiendo más rápido de lo pensado y llegando por senda hasta la zona de la "Loma del Cuco". Aquí vuelvo a comer y me preparo mentalmente para el peor pedazo de la carrera, que es la Peña Alta y la bajada hasta la Lándiga. Se trata de una senda muy vertical entre hoyos de repoblación y con un terreno resbaladizo. De hecho, los que vienen detrás mío se llevan un par de porrazos, por lo que hace extremar más las precauciones. Una vez pasada la peor zona viene una bajada más asequible hasta la fuente, donde es el ecuador de carrera y donde encontramos un buen avituallamiento. Aquí llego pasadas las 4h de carrera, y es donde recargo agua y paro a comer algo, saliendo bastante rápido para no enfriarme hacia la siguiente subida.

Pero justo al ponerme en marcha comienzo a notar las molestias en la rodilla que tanto miedo tenía. De momento no es mucho pero sí empiezan a darme vueltas por la cabeza su posible lastre durante de la carrera. La subida a Yerbas me cuesta algo más, pero viendo el ritmo de la gente aun voy bastante bien y consigo sacar una buena ventaja en este punto. Sin embargo, tras coronar viene un largo descenso muy corredor y la rodilla comienza a pasar de casi a una imperceptible molestia a pegarme a veces algunos dolores, por lo que no puedo llevar el ritmo que quiero aun encontrándome bien. Todo este enlaza con una bajada por senda muy entretenida pero que machaca mi rodilla y es al finalizar donde paro unos segundos a estirar los cuadriceps e isquios, cosa que parece momentaneamente calmar mis molestias hasta llegar al avituallamiento del kilómetro 40.

Es aquí cuando de forma casi instantánea el Sol empieza a calentar mucho, parece casi un día de verano y rondaremos seguro los 17º, un abismo con los 0º que hacía en la salida. Y queda una subida muy dura por la altura de carrera en que estamos y que la hacemos al tran-tran, regulando y comiendo para no perder fuerzas. La rodilla otra vez me comienza a molestas pero me olvido de ella, aunque se que incoscientemente estoy cargando más sobre una pierna que sobre otra y lo pagaré al final. La ascensión se hace pesada pero llegamos al control y me dispongo a correr. Ahora queda el esfuerzo final, una larga y machacona bajada de casi 7km que hace destrozar los cuadriceps, y más que la rodilla me avisa de que vaya despacio!. Una lástima, me encontraba bastante bien y me hace desanimarme, y este pedazo es larguísimo y con mucho calor. Me doy ánimos y consigo llegar al avitu donde vuelvo a parar a estirar. Además como algo y relleno bidones. No quiero enfriarme porque se que la rodilla me dolerá más.


El siguiente pedazo es bastante puñetero, tiene subidas y bajadas y zonas para correr pero que cuestan a estas alturas y entras en el dilema "corro o camino". Intento que esa lucha mental la gane la carrera pero a veces me toca parar a caminar, ya que las piernas empiezan a estar cansadas, aprovechando esos momentos para comer bien. Tras llegar al alto del Chorizo se que queda dar lo último, y es la subida del Morron de Gitam...muy corta, apenas 300m...pero del 45% de desnivel!. El panorama en esta subida es desolador, gente que vomita, gente apartada y agotada por el esfuerzo. Yo también voy cansado pero al ver la gente así me da un buen ánimo y supero casi sin enterarme este escollo! Se puede decir que ya lo tenemos!. Pero todo no puede ser bueno y tras reanudar el trote, la rodilla me pega un susto, un buen pinchazo. Menos mal que el avituallamiento está a 200 metros, aprovecho pues andando poco a poco hasta el y comer y ver si en este punto tienen Radio-Salil. Es por gracia divina que sí. Me pongo una gran capa y estiro algo, y por arte de magia y por saber que queda poco, a sufrir lo que queda, se que no voy a bajar de las 8h y que voy a estar cerca de las 8:30h a este paso. Pero es en este momento cuando la pomada hace efecto y mitiga mucho las molestias y comienzo a trotar para posteriormente aumentar la velocidad y tener un buen paso para las alturas que llevamos de carrera. Se me hace corta la última bajada (que todos los años odio por tener mucha piedra) y nos disponemos a ver el cambio del final de este año. Es aquí donde me encuentro al escoba y amigo de la carrera corta e incoscientemente me paro a saludar e intercambiar unas palabras con él, hasta que el mismo me avisa de que "¿qué haces parado? corre", "es verdad!" me he parado unos minutos a hablar, así que retomo la marcha y me tomo el último gel y a por todas.

Como conozco la zona se que nos están dando una buena vuelta hasta la meta, a veces en zig-zag pero el cambio de este año me gusta mucho y es entretenido. No se como iría al final pero paso corredores de ambas distancias, este año tengo una mayor velocidad y lo noto. Ya estoy dentro del pueblo y enfilo la calle principal donde allí están los míos esperándome y entro en meta en todo un mar de aplausos en 8:07:58 ;-). Otro reto conseguido, finalizo muy muy bien físicamente y ahora las rodillas ni me molestan (luego ya verás jejeje) y allí me encuentro con Daniel que hizo un tiempazo y otros corredores y amigos con los cuales charlo y pasamos un rato, lo justo para no quedarme frío. Me despido de Daniel que tiene que regresar a la capital y ya es volviendo al coche donde antes realizo unos pequeños estiramientos y camino un poco mientras tomo algo para recuperar energía.

Se ha quedado ahí el poder hacer sub-8h, creo que para mí es difícil debido a mi técnica de bajada, pero se que estoy muy muy cerca y para mí es un gran logro todo el trabajo hecho y sufrido durante los últimos días y lo que han tenido que aguantar los míos para poder entrenar. Ahora toca descansar un poco y afrontar el último reto de la temporada (para mí), que será el GR10x. Tras ello, y mi cuerpo empieza a pedir descanso, le daremos esas vacaciones que se merece.





miércoles, 20 de noviembre de 2013

Review Mochila Raidlight Marco Olmo 5L





Sin duda, la mochila es un elemento indispensable para el corredor de montaña. Sin ella, nuestras salidas de entreno de cierta entidad o la partipación en carreras de distancia considerable se vuelve impensable. Afortunadamente y gracias al auge que está teniendo la práctica del trail entre los aficionados al running, se ha producido una evolución muy considerable en el diseño de las mochilas para este propósito. Se ha pasado de simples mochilas ligeras de senderismo a todos un arsenal de productos específicos para este deporte, donde se prima ligereza, poco movimiento, buena capacidad y acceso a los contenidos y comodidad.




Un modelo que sin duda llama la atención por su estructura, y que es prácticamente pionero en el diseño y uso de los bidones en la parte delantera es la mochila Raidlight Marco Olmo 5L que ya lleva unos años en el mercado y que aun a pesar de las evoluciones de otras marcas, sigue teniendo unas prestaciones sensacionales para la carrera de montaña, teniendo una versión actualizada con algunas pequeñas mejoras, pero manteniendo la estructura original que tan buen resultado proporciona.





Como he comentado, lo primero que llama la atención es la disposición de los bidones en la parte delantera, llevando unos bidones especialmente diseñados por la marca con una pipeta que permiten beber de ellos sin tener que estar metiendo y sacando los mismos constantemente en carrera. Además, y a diferencia de otras mochilas, los bidones se situan bastante altos con respecto al pecho, quedando las pipetas "relativamente" cerca de la cara y teniendo al comienzo una pequeña sensación de agobio por las mismas que desaparece a las primeras salidas y dándose uno cuenta que realmente son muy funcionales. Obviamente, si no se desea utilizar los bidones de la marca pueden emplearse cualquiera de los bidones de ciclismo que se tengan, desapareciendo esta sensación de tener tan cerca de la cara las pipetas.



Lo más curioso del sistema que ofrece Raidlight para situar los bidones en la parte delantera con respecto a las soluciones adoptadas actualmente por otras marcas es por una parte la situación, mucho más alta en altura del pecho, lo que permite ayudar al sistema de bidones con pipetas que se tenga cerca para poder beber, y por otra, el realmente para mí mejor invento en cuestión que es la forma en la cual los contenedores de los bidones se sitúan en el pecho...



En productos de otras marcas se opta por disponer de unos "tirantes" de mochila bastante anchos, tipo chalecos y en los cuales se situan en el los contenedores de los propios bidones sin que estos se apoyen sobre el cuerpo. Esto puede producir que si el sistema no está bien diseñado o los bidones no tienen el ancho o tamaño apropiado puedan tener ligera "holgura" y se balancéen dentro del contenedor con la marcha a altas velocidades, siendo no algo malo, pero puede ser molesto e incluso algunas veces que ese pequeño movimiento te toque justo en una costilla si el material no es lo suficientemente acolchado.



Sin embargo Raidlight ha tenido una idea brillante, que para mí es realmente el éxito de esta mochila. En este caso, los contenedores de bidon son unos bolsillos que se prolongan de los tirantes de la mochila y que cuando te los pones que amoldan a tu contorno del pecho, teniendo a su vez una gran capa acolchada para que no sientas los mismos. Una vez puesta la mochila y ajusta la banda pectoral los bidones no se mueven en absoluto, manteniendo la mochila completamente fija en tu espalda, incluso en ritmos altos. Encima al ser tan acolchados, la sensación es bastante agradable.



Pero la mochila no se queda aquí ya tiene multitud de detalles que la hacen interesante. Por delante, y en los bolsillos contenedores de bidón se encuentra un bolsillo de malla donde podremos llevar barritas y geles en cada uno de ellos para así no tener que para a quitarnos la mochila y poder comer. En la nueva versión además, se añaden sobre los tirantes dos grandes bolsillos donde podremos guardar otro materail como son el GPS o móvil, más comida, pañuelos, vaselina, etcétera, todo muy accesible y cómodo o también pudiendo adquirir estos por separados y ser acoplados en la propia mochila. El objetivo es que no debas quitarte la mochila salvo necesidad.



La parte trasera sorprende bastante ya que a simple vista parece que no nos va a coger nada en el interior pero una vez empezamos a meter cosas podemos llevar un material mínimo ligero para cualquier situación. La capacidad son 5L y pueden sobrar para llevar un pequeño kit de emergencia (pequeño frontal, manta térmica, venda, vaselina y tiritas), frontal y pilas, calcetines, gorro, buff, guantes, chaqueta impermeable y camiseta térmica todo esto en una compartimento cerrado en el interior. Pero aun hay más. Dispone de un bolsillo pequeño de malla en la parte externa donde podemos guardar más comida y otros pequeños objetos. Si todo esto pareciese poco dispone de un bolsillo muy accesible cerrado para guardar la documentación, las llaves y el móvil. Finalmente, dos mini-bolsillos de malla a los laterales están dispuestos para guardar alguna que otra barrita o gel más. Encima dispone de dos gomas para poder sujetar los bastones, o bien, en la versión moderna, se le acopla ya el carcaj de la misma marca para poder portar los bastones de forma rápida. También, puede adquirirse este elemento por separado y adaptarse a la mochila, funcionando realmente bien.



La mochila queda bastante alta, tanto que no necesita ni cinturón ventral para quedar firmemente sujeta y esto es de agradecer en especial en esos días calurosos de verano donde puedes llevar la espalda al aire. Sin embargo, y para aquellos que necesiten un espacio extra tiene cinturón ventra en el que puede añadirse algún bolsillo adicional. Para acabar de completar todo, la banda pectoral integra el silbato obligatorio. Otra cosa a destacar enormemente de la mochila es la cantidad de acolchado de que dispone, tanto en la espalda como en los tirantes. Si bien al principio se piensa que es un gasto en gramos (para aquellos que miran el peso) hay que decir que es de agredecer, ya que esta mochila tiene que ir bien fija al cuerpo y ese acolchado se agradece cuando se pasan horas con ella puesta, tanto que te olvidas que la llevas.

Ya en marcha, una de las cosas que pasan al ponerte la mochila por primera vez es una profunda decepción. ¿Por qué? pues muy fácil, porque hay que aprender a ajustarla. Como se ha dicho la mochila debe ir bien firme y pegada al cuerpo, muy ceñida, tanto que no se mueva pero que nos permita respirar y movernos cómodamente. Para ello nos pondremos la mochila y ajustaremos los tirantes para que quede de esta forma. Una vez tengamos la posición que deseamos y con los bidones totalmente a nuestro gusto (teniendo en cuenta que quedan altos) procederemos al ajuste pectoral mediante la banda. Los bidones no deben de hacer "V" o "A" sobre nuestro pecho por un exceso de apriete de la banda pectoral, sino que estos deben quedar relativamente separados hacia la parte exterior de la "caja" del pecho. Una vez ahí, realizamos otro reajuste mínimo y fino de los tirantes y voilá! ya la tenemos ajustada...pocas veces más tendrás que ajustarla, cambies el contenido, peso, botellas. Increíble.



Esta mochila es ideal para entrenos, carreras y ultras donde el tiempo sea bastante bueno o bien dispongamos de avituallamientos. Puede utilizarse también en ultras con variación de climatología muy grande pero llevando todo material muy ligero. A cambio ganaremos en comodidad y en no sentir que se lleva. Totalmente recomendable y mi mochila favorita desde el primer (segundo ;-) ) día.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Raidlight Sardona Ultra Trail

Este fin de semana pasado, medio Team BBQ participó en el Raidlight Sardona Ultra Trail en los Alpes Suizos. El Sardona UT consiste en un bucle de 82km con 6.100m de desnivel positivo (y lo mismo negativo) por un Parque Nacional alrededor de la Falla Tectónica Suiza de Sardona (patrimonio de la humanidad de la UNESCO). Lo siguiente es la crónica de la participación del componente Alemán del Team BBQ en esa espectacular carrera:

Quería acabar el verano con una carrera más y después de haber hecho varios ultras en terreno bastante "corrible", me apetecía hacer algo mas montañoso. Así que ya estaba entrenando con mas desnivel y en terreno técnico, cuando a mitad de Agosto me llegó un correo de Sergio Fernández, representante de la marca RaidLight en España, preguntándome si me apetecía hacer el Sardona UT en Suiza. No tardé mucho en decidirme y así es que un viernes por la tarde me encuentro en el pueblo de Wangs, recogiendo el dorsal y un pase para la tele-cabina que me llevará el día siguiente a la línea de salida en la aldea de Furt a 1500m de altitud. La meteorología ha sido delicada en los días previas y hasta este momento no estaba claro si el recorrido original era transitable. Me comentan que sí, que tienen luz verde del equipo de rescate de montaña, pero que hay 15cm de nieve en los pasos altos y que hará mucho frío.

El día siguiente cojo la primera tele-cabina a las 6:30, subo a Furt, tomo un té en el hotel oficial de la carrera, paso el control de material y tomo la salida con unos 100 personas mas.
Los primeros metros son de bajada por buenas sendas, pero no dura mucho esa alegría. Enseguida empieza la primera subida importante y nos suben unos 2.000 y algo metros, donde se baja un poquito al primer avituallamiento. No se baja mucho, y enseguida subimos otra vez para llegar  a una zona alta con unos lagos preciosos conectados por puertos y crestas menores hasta pasar por el puerto de Lavtina a 2587m. Voy con calma todavía, ya que queda mucho desnivel y distancia, pero las pierna responden bien.

Foto de Tobias Paik


Ya vamos pisando nieve durante un rato, pero  hasta que empieza la bajada no causa gran problema. Viene una bajada larga de mas que 1.000m por senda técnica. Voy con mucho cuidado en esa primera parte nevada y solamente pliego los bastones cuando pasamos a terreno menos inclinado y con barro en vez de nieve. La bajada parece interminable, pero avanzo bien. En un desvío con marcaje "minimalista" dudo un poco y pierdo tiempo sacando el GPS con el track de la carrera (no lo había encendido antes). Veo gente por debajo pero no me fío, ya que no sería la primera vez la mentalidad oveja haga que se equivoca todo el pelotón.


Foto de Tobias Paik

Foto de Tobias Paik

Llego abajo y hay un avituallamiento básico que consiste en un tío con una caja de barritas, cosa entendible, ya que el lugar es un poco inaccesible. El agua hay que coger del río, y pienso que me hubiera gustado saberlo antes, para no tener que coger agua en un punto tan bajo con mucho ganado pastando mas alto. Pero ahora mismo no hay otra, porque enseguida empieza la segunda subida gorda, casi 1.000m de nuevo. Esa subida también se hace larga, pero el paisaje compensa. Todavía voy muy bien de tiempo. Pisamos nieve otra vez, y esta vez los cresteos y el principio de la bajada se pone mas complicado. Hay cuerdas y personal del equipo de rescate de montaña ayudando y se pasa sin problema, aunque sí que pierdo bastante tiempo. No me preocupa demasiado, porque sé que ahora viene una bajada larga de 1.200m, desde lo que debería ser el KM25, hasta el siguiente control en el KM31. Me imagino un bajada mas o menos corrible como la ultima, pero estoy equivocado: Hay barro hasta las rodillas y lo que en seco me costaría no mas que media hora, en estas condiciones me cuesta casi 2 horas. Encuentro el control en lo que dicen que es el KM33. También me comentan que para el siguiente control en el KM45 me quedan 2,5 horas y que son 200m mas de bajada, luego 1.200m de subida y que voy justito para el limite de tiempo. Es la primera vez en una carrera que me tengo que preocupar por los cortes de tiempo. Al final resulta que casi 60% de los corredores no pueden acabar la carrera, la mayoría por los limites de tiempo, cosa que indica que sí que estaban calculados un poco justos.
Foto de Tobias Paik


Como no hay tiempo que perder, aprieto. Ahora voy algo estresado y mentalmente no es una situación ideal. En la bajada me encuentro con buena senda, pero justo cuando pienso que puedo recuperar tiempo me encuentro con un granjero que está intentando hacer cruzar cientos de vacas por la senda. Como no sé que mas hacer intento ayudarle gritando y moviendo los bastones para quitar las vacas de la senda. Pierdo tiempo y ya voy muy justito. Empieza la subida y aprieto mas. No es el ritmo ideal para un ultra, pero no hay otra. Justo antes de llegar al collado alcanzo un grupo de 8-9 personas con la misma preocupación. Llegamos al collado y donde espero ver el refugio con el control no veo nada. Una zona alta con barro y algo de nieve. Un voluntario nos dice que quedan 45 minutos al control y solamente 30 minutos hasta el corte. Todos se desaniman y el resto del grupo decide andar con calma hasta el refugio y rendirse. Pero yo pienso que hay que intentarlo y empiezo a correr lo mas rápido que pueda. Pasa el tiempo del corte, pero me queda la esperanza de que si solamente lo paso unos minutos, igual me dejan continuar. Cuando por fin llego al control, con 10 minutos de retraso, me comentan que se ha ampliado el tiempo de corte una hora en este sitio y 1 horas 30 en total por las condiciones de nieve y barro. En este momento se me quita un peso enorme encima y pienso que salvo catástrofe voy a poder acabar la carrera. Si me importa tanto una meta, pues, la voy a conseguir. Pero aún queda mucho recorrido y hay un corte de tiempo más en el KM68, ahora a los 17 horas de carrera. Luego me entero que nadie que pasa por este control mas tarde que yo consigue terminar la carrera.

Salgo del control, después de tomarme un caldo, y enseguida me sigue un esloveno que estaba recuperándose en el refugio. Parece que está interesado en estar cerca de mi GPS (el marcaje no es optimo). No me importa nada tener algo de compañía y empezamos hablar. Cuando se hace de noche sacamos los frontales y enseguida me doy cuenta que el frontal del esloveno va muy mal. Vamos que no tendrá ni 10 lumen ;-). Yo llevo el Petzl Nao y como vamos por un trozo muy técnico decido ponerlo un momento en el modo "iluminación nivel aeropuerto" y por supuesto olvido bajar la intensidad de nuevo para ahorrar pila (eso me causará problemas mas tarde).

Empieza a llover bastante. Me pongo el chubasquero y continuamos. Hacemos una larga bajada a un ritmo relativamente bueno, parando una vez para cambiar pilas en el frontal del esloveno. No mejora la cosa y ya está claro que le tengo que acompañar al siguiente control. Cuando empieza la siguiente subida pierdo un poco de tiempo esperándole, pero no me importa demasiado, ya que se trata de pocos minutos. Pienso que en el siguiente control, me despediré de él. Llegamos al control (KM55) y queda una subida larga (700m?) y una bajada de 900m al ultimo limite de tiempo intermedio. Por el momento no preveo problema en llegar a tiempo, cosa que cambiará rápidamente.
Encuentro Nocturno preocupante

Digo al esloveno que voy a intentar acelerar un poco y que le vaya bien. Piensos que se quedaría  en el control con su frontal roto/malo, pero el muy cabezón me sigue. Dice que va a aguantarme el ritmo. Cometo el error de no expresar verbalmente que no quiero responsabilizarme de él.
Aguanta bien en lo que queda de la bajada, pero en la subida empieza a ir mas lento. Cuando me me separo un poco de él no ve nada y me pide esperarle. Dice que si le dejo solo en estos montes se va a morir, cosa que dudo, ya que debería llevar suficiente ropa para poder esperar al corredor escoba. ¿Pero que hago ahora? Por supuesto no puedo negar a ayudarle, así que le espero. Cada vez vamos mas lento y empiezo a preocuparme por el corte de tiempo. De repente empieza a parpadear la luz de mi frontal, indicando que se está acabando la batería. Claro se me olvidó bajar la intensidad y he gastado toda la carga en 3 horas. Pues no pasa nada, saco el frontal de emergencia. Al sacarlo se me rompe un trozo de plástico que sirve para abrir el foco, así que mi luz ahora tampoco es ideal. No pasa nada, decido meter pilas en el frontal principal, quitando la batería recargable. Nunca lo he probado, pero se supone que funciona bien. Sin embargo, me doy cuenta que las pilas llevo no sirven para este frontal; son demasiado grandes. Un error muy tonto! Pues continuamos con el frontal perjudicado.

Por fino llegamos al puerto y ahí nos espera un voluntario que nos informa que en el siguiente control ya no dejan salir a nadie. No puede ser! Nos enfadamos bastante, no con el voluntario, sino con la situación y la carrera en general. El voluntario es majo y hasta me regala dos pilas para volver a poner mi frontal principal en condiciones, cosa que agradezco mucho.

Desanimados empezamos a patear cuesta abajo. De repente pienso: y si el voluntario no sabe que han ampliado el tiempo una hora y media? Probablemente no tendrá cobertura ahí arriaba y asume el plan original. Intento animar a mi compañero, pero ya no puede mas. La bajada es por pista, pero tiene que ir andando. El tiempo se nos echa encima y me enfado mas y mas. Con el esloveno hasta cierto punto, pero mas conmigo mismo, por no dejar claro en el ultimo control que debería quedarse ahí. El tiempo pasa pero no avanzamos cuando por fin veo la luz de otro frontal delante. Encontramos a otro corredor que va cojo y se quiere retirar en el control. Va cojo, pero está bien y tiene luz, así que digo al esloveno que baje con él y entro en modo sprint.

Unos 20 minutos mas tarde llego a una aldea pequeña y entro en el control con solamente 2 minutos de reserva. El equipo de rescate de montaña me miran, me ven muy entero y dicen que si consigo salir a tiempo, es decir en menos que 2 minutos, puedo continuar. Cojo agua y me tiro. Llevo 17h corriendo, pero el subidón de haber llegado al control a tiempo me da energía.

Empieza la ultima subida de la carrera. Son 1.400m de subida y 900m de bajada en 14km para llegar a meta y tengo 4 horas ye media para hacerlo. No dudo que lo voy a conseguir. En poco tiempo alcanzo a un grupo de 2 personas y juntos pillamos otro de 3. Adelanto los 3 personas antes de llegar al puerto y empiezo la bajada. En el otro lado de la montaña hay una niebla increíble y no veo casi nada. Los dos que van delante se me escapan. La bajada es sencilla, pero no puedo aprovechar del terreno, porque estoy pegado a la pantalla del GPS para no salirme del recorrido. En un momento voy por una pista y de repente me encuentro en un campo entre vacas. En la niebla me he salido de la curva. Así poco a poco voy bajando, hasta por fin se abre la niebla y veo la meta. Me pongo a correr de nuevo y poco después paso por meta en 20 horas y 44 minutos.
Aunque llego entre los últimos, estoy muy satisfecho con mi rendimiento. Los limites de tiempos eran muy duros, teniendo en cuenta el terreno y sobre todo las condiciones. Me digo, que si contamos los 60% de la gente que no han podido acabar por no llegar a tiempo, acabo en los top 40% ;-)

El chef del hotel a lado de la salida está todavía en la cocina, preparando platos de espaguetis a las 5:30 de la mañana, cosa que agradezco y aprovecho al máximo.  Ahora solamente queda esperar la primera tele-cabina, pero tengo suerte y el equipo de rescate me ofrece bajar en coche con ellos. Por fin llego a mi hotel a las 7 de la mañana y puedo dormir un ratito.

En general ha sido una carrera increíble, bien organizada (el marcaje bastante mejorable) en un sitio precioso. Los tiempos de cortes son demasiado duros para la mayoría de la gente, pero la organización dice que es porque quieren una carrera dura para gente muy preparada. Es una filosofía que no me parece mal, siempre que esté muy claro desde el principio.

Material utilizado:

  • Zapatillas Salomon Speedcross 3 (elección muy acertada!)
  • Mallas Hoko (combinación de malla pirata y pantorrillera)
  • Camiseta interior Hoko Ada
  • Camiseta de manga larga RaidLight Performer
  • Chaqueta RaidLight Top Extreme
  • Gorro Gore Windstopper
  • Mochila Ultimade Direction SJ
  • Frontales Petzl Nao y Tikka Plus
  • GPS Garmin Dakota 20
Alimentación:
  • 7 barritas Cliff 
  • 7 geles Powerbar
  • varios trocitos de barritas básicas en los avituallamientos
  • varios litros de bebida energética con 5% proteína 
  • un vaso de caldo
  • agua 



lunes, 2 de septiembre de 2013

Grand Raid des Pyrenees 2013 - 160km (D+10000m/D-10000m). Un buen palizón!.


 Por fin llegó el reto del año para la parte española del TBBQ!. La verdad es que realmente no se por donde empezar a contar esta larga historia. Las últimas semanas sufría de una baja motivación para correr esta carrera, principalmente porque justo un mes antes de la prueba se me ocurrió jugar un partido de fútbol que me ocasionaron unas molestias en los isquiotibiales que todavía aun hoy no han desaparecido. Esto hacía tener un miedo a la carrera enorme, ya que si a los 20 minutos de ponerme a correr me molestaban...no quería ni pensar que iba a pasar en 160km de trail. Además, la fecha en que se celebrara, en plenas vacaciones fastidiaba, ver como tienes que cuidarte, pero las cervezas y tapas están ahí...uff!!, que trabajo mental ;-)...comenzamos...





Nos hospedamos unos días antes en Bielsa, a 40 minutos de la salida, pero en territorio español, y de allí tenía la base de operaciones. El jueves fuimos a dejar las bolsas, recoger el dorsal y escuchar el briefing, donde pudimos conocer a otro miembro del Raidlight Team España, Daniel H., del que nos enteramos que hizo un carrerón y acabo muy rápido!, enhorabuena!. La bolsa del corredor completa y curiosa, con mucho producto de la zona y una camiseta Salomon...con el logotipo del Carrefour jajaja...para tener una buena publicidad. En el briefing se indica que hay algunas zonas con mucha agua y otras indicaciones, pero que en general y para lo que es alta montaña, el tiempo nos "respetará". Tras todo esto volvemos a casa, a engullir un plataco de pasta y a dormir unas 5h, si se puede, ya que el despertador sonará sobre las 2:30h, tiempo medido para desayunar y ponerse en marcha hacia la localidad de partida Vielle-Aure.





Llegamos pronto y hace fresco 13º, que junto con los nervios hace que sentirse aun una mayor sensación de frío, pero poco a poco nos calentamos y va llegando la gente, hasta llenarse la plaza completamente. Ya queda poco y llegamos a las 5am, la hora de salida, pero no, todavía no está preparado todo y salimos con 5 minutos de retraso. En ese momento me despido de Amparo hasta ¿?¿?¿?¿? y salimos veloces por las calles de la población; al principio asfalto, luego una pista que comienza a empinarse y donde se puede avanzar rápido, pero la gente empieza a sacar bastones y a ir en grupetas y se hace difícil adelantar. De hecho se forma un tapón considerable al entrar en la senda que poco a poco nos lleva hacia el Col de Portet (2400m), pero que con las fuerzas y ganas llegamos enseguida. En estas se llega al restaurante Merlans, kilómetro 14,2 en unas 2:40h. Ya es de día y de repente, todas las ganas de hacer de vientre y que no pude hacer en los días anteriores me vinieron ahí, perdiendo unos 15m en el avituallamiento, pero saliendo mucho mejor. Es en este momento cuando la carrera cambia radicalmente...el terreno se vuelve muy técnico con sendas estrechas con piedras y raíces, bloques de piedras y lajas de lo mismo, en un paisaje espectacular pero que obliga a caminar y a tener cuidado de donde se pisa. Además la subida a diferentes collados se hace lenta por el terreno, tanto en subida como en bajada donde además se debe sortear los diferentes riachuelos y el terreno húmedo como estaba de las tormentas del día anterior. Tanto es así, que nos costó casi 6:30h llegar a los 30km, donde estaba el siguiente avituallamiento y Amparo y en donde había que coger muchas energías ya que desde ahí había 1800m de desnivel positivo para ascender al Pic du Midi de Bigorre a plena luz del día, con una buenísima temperatura. Poco a poco y subiendo en zig-zag vamos alcanzando nuestra meta. Como en subida este año me encuentro genial paso a mucha gente que se encuentra fatigada por el esfuerzo. Yo voy tranquilo con mi ritmo y paso sin problemas el corte del Col de Sencours pudiendo realizar los últimos D+400m hasta el pico. La subida es impresionante, se llegan casi a los 2900m de altitud y arriba de nuevo está otra vez Amparo. Llevamos 9:30h de carrera y 41,6km con D+3500m pero me encuentro en ese momento muy bien, cómodo con todo, así que parto presto de nuevo hacia el avituallamiento del kilómetro 44, donde debo parar un poco a comer y avituallarme bien ya que según el perfil viene una sección que no parece pero va a ser muy "cojonera" de continuas subidas y bajadas a collados por senderos muy técnicos.



Tras salir del avitu, y encarando esta sección, de nuevo el estómago me dice basta y tengo que parar otros tantos minutos a perder peso ;-)... Tras ello cojo mi ritmillo y me encuentro fenomenal, aunque las subidas son cortas e intensas a los diferentes collados enlazando pequeñas subidas de unos D+200m pero con mucha piedra suelta y que dificulta el agarre y la tracción. A esta hora el Sol comienza a apretar y es el tramo más largo sin avituallamientos, casi 20km por zona técnica, con un paisaje espectacular en sucesión de diferentes vallecillos con lagos preciosos. Ya encarando las últimas estribaciones llegamos al Lac Bleu y encontramos la anécdota más grande de la carrera y es que veo a un montón de gente parada y que me dice que pare que la carrera está parada. En ese momento todo el que llegaba se encontraba en esa situación, algo extraño, y más cuando aparece un helicóptero que se posa sobre el lago...¿qué ha pasado?. Jugando con los idiomas nos enteramos que un corredor ha caído al lago y no podemos continuar para no pasar por la senda y estorbar las labores de rescate con la posible caída de piedras. Aquí estamos parados un montón de tiempo, no lo cuento pero puede ser más de 30 minutos que posteriormente la organizació NO descontaría de nuestra marca. Tras reaunadar la marcha la carrera se hace otro tapón puesto que continuan las subidas criminales y que parece que nunca acaben. Con estas llegamos por fin a la estación de esquí de Hautacam tras casi 5h entre avituallamientos. Aquí comemos algo y cargamos agua para una bajada difícil por la niebla y que comienza a oscurecer. Nos acercamos a Villelongue, lugar donde tenemos una bolsa de vida...son solo 10km, pero no llegan puesto que al final de nuevo nos meten por una senda estrecha con algunos pasos que hacen parar y nos tenemos que poner el frontal para los últimos metros. Finalmente llegamos y está todo ocupado para sentarte de corredores, así que cambiarse y comer se realiza de forma penosa no descansando bien. De hecho perdí la vaselina (gran problema) y se me hizo incómodo poder hidratarme bien. Aun así estuve unos 40m. Al salir ya es de noche y coincido con un chico Vietnamita, pero que es francés y vive en París...y con nuestro dominio de los idiomas ;-) vamos semi-charlando. Esto viene bien puesto que vendrá el pedazo más pesado de la carrera y es lo D+2000m de subida desde Villelongue hasta el Pic de Cabaliros. Al comienzo es bastante asequible, ligera pista en ascenso, que permite enganchar un buen ritmo. Sin embargo, las nubes bajas "atacan" y se hace difícil ver ya que la luz del frontal se refleja en ella. Con esto, llegamos a un avituallamiento intermedio en mitad de la nada excepcional, los chicos parecían tener montada una discoteca y aquí ya empieza a verse el cansancio de la gente, incluso hay quién se duerme en las pocas sillas que habían. Yo tomo unas tazas de café y salgo a coronar. A partir de este punto, vuelve el terreno técnico, y además de noche, con alguna trepada y paso que no se como será de día, pero justo a las 4am llego al alto de Cabaliros donde paro unos instantes a comer algo y observar el espectáculo que se ofrecía. Había luna llena y las nubes estaban sobre los 1500m de altura...se podía observar un mar donde los picos de los Pirineos sobresalían...me quedé 5m pasmado viendo el paisaje hasta que reaccione, espectacular. A partir de aquí, una bajada por senda estrecha con mucha piedra y mucho barro, hacía el descenso muy cansino y que había que hacer casi andando, si bien se tenían fuerzas, la noche, la niebla y el piso húmedo no lo aconsejaban. Un descenso también largo de más de D-1500m había que hacerlo con calma. En estas, llegamos todavía de noche a Cauterets, otro lugar de avituallamiento donde tomamos el desayuno y descansamos un poco. Aquí ya hay muchísima menos gente, creo que se han retirado ya bastantes y se respira algo más de paz.



Tras un poco de descanso salimos en marcha. El cansancio se nota y además, las rozaduras por el sudor empiezan a molestar...y perdí la vaselina!...uff!...encaramos el Col de Riou amaneciendo y con fuerza, me encontraba bien...con parada por el camino de nuevo (que me pasa ¿?¿? jeje) y llegamos al alto del collado donde iniciamos un descenso hasta el restaurante de Aulian-Luz Ardiden donde podremos de nuevo tomar algo...notando ya el cansancio, pero físicamente bastante enteros para la paliza. El día del sábado fue distinto, todo el día con niebla y lluvia "meona" que hará al final pasar un gran castigo. Tras este punto (el kilómetro 110), los amables organizadores nos han puesto para disfrutar una bonita bajada muy empinada por senda no definida por hierba, con lo que los resbalones son la orden del día. Yo me lo tomo con mucha calma y bajo a "culadas", no merece la pena perder la carrera por una caída tonta. Tras pasar este pedazo, tenemos una senda llena de piedra resbalidiza, donde el sueño por fin me gasta la primera mala pasada y es que dos piedras lejanas me parecen dos perros enormes y me quedo parado esperando 5m a que venga otro corredor para no hacer la vergüenza ;-)...y tras pasar el corredor...esos perros eran unas piedras...es momento de espabilar ;-), ya queda poco para el avitu....pero nos meten 3km por carretera que se hace muy bueno para los cuadriceps y donde ahora sí, ya los empiezo a notar...


...tras este pedazo tan malo llegamos al avituallamiento...solo nos quedan 42km!, un maratón...aquí me cambio otra vez de ropa, estaba empapada y las rozaduras son de aupa...descanso más y como bien e intento hacer lo mejor que puedo la digestión. Y salgo a encarar la última parte de carrera!!!...y allá vamos con otros D+1800m ;-)...al comienzo bastante asequible, aunque se hace muy largo llegar a Tornaboup, donde esta el avituallamiento y justo a un kilómetro comienza el mal tiempo de verdad, más lluvia fina, más frío...y al llegar al avitu se juntan los corredores del GRP80 que salieron hoy, con lo que se forma un cacao impresionante para poder descansar y avituallarse. En ese momento me encuentro bien, pero es salir del avitu y empezar el terreno muy técnico, con hasta mini-trepaditas, sin sendero, piedras, lajas y riachuelos con roca resbalidiza. Es aquí donde veo a gente darse unos piños de aupa por saltar de piedra en piedra y evitar los riachuelos...así que como la musculatura no está para ir a lo Mario Bros y lo habilidoso que soy decido pasarlos andando mojándome....bien, al principio, pero con el día, los pies se comienzan a arrugar y hacerse grietas con la consecuencia de dolerme al apoyar...se acabó el paso firme y ligero y vamos a un paso cada vez más lento. Y el terreno técnico sigue cada vez más chungo, y el frío, y la niebla ;-)...y un el tobillo comienza a dolerme una barbaridad, voy medio a la pata coja por este terreno...todo ha sido en menos de 1h...¿qué he hecho mal?. A partir de aquí la debacle. Una bajada del Col de Baregés interminable, por un terreno bastante malo y toda la zona del lago, llena de agua empeoran mis pies. No puede ser que 5km me cuesten 2h!!!...pero sí, me cuestan ese tiempo!...uff!...de perdidos al río, quedan 14km y como sea hay que hacerlos. En el restaurante un par de calditos me reaniman ya que el frío empieza a aparecer, dicen los que están allí que estaremos sobre los 4º y hay que subir todavía el Col de Portet. Extrañamente lo subo muy bien, incluso paso a corredores de ambas carreras, pero al llegar arriba, y encarar la última y larga bajada, el tobillo me dice que no. Es curioso porque viné con dudas sobre mis dolores en los isquios y estos apenas me han molestado, pero el tobillo y las plantas de los pies no me dejan tirar como yo quiero. La bajada es muy pronunciada con niebla y tengo que hacerla caminando, me comienza a pasar gente y me hundo. Los kilómetros no pasan, y las horas también!...Encima me entra el sueño y ya no tengo más comida. Llego a un punto y me dicen que quedan unos 7km, me animo a correr pero justo entramos en una senda embarrada totalmente con mucho desnivel, la gente se cae...yo también y casi me cargo un bastón. Menos mal que es solo chapa y pintura ;-). No llevo zapatillas sino parecen barcos y este pedazo lo hago muy cauteloso...no se la velocidad pero no más de 3km/h!! agh!!...no llegaré nunca...pero he de ser cauto y forzar ahora puede ser una lesión de tobillo importante, así que voy poco a poco y al menos minimizar daños. Por fin, a lo lejos escucho como ruído y se sale a una carretera...quedará sobre 1.5km!...bien!!...intento correr, pero el tobillo y los pies me dicen que me lo piense mejor ;-)....así que, me reservo para la carrerita de rigor de los últimos 200m...son un poco más de las 3am del domingo...y ahora sí, allí veo a Amparo y comienzo a dar pena trotanto, con dolor...pero con la sonrisa de ser finisher de una carrera brutal...sí!, entro en meta en algo más de 46h de tiempo total (la organización no descontará el tiempo tarde de la salida ni de la parada de carrera) y si bien en vez de camiseta de finisher nos dan una mochila barata, estoy contentísimo. Se que algo podía haber bajado más de tiempo, pero contento de ser unos de los del 48% de finishers...cambio de ropa y ver como los pies parecen garbanzos y mi tobillo una bota de vino...da igual, a descansar y mañana será otro día...así me duermo hasta el hotel, una duchita y una gran bocadillo y a descansar...y dentro de nada a pensar en el siguiente. Allez, Courage!!! ;-).





La bromita y perfil según mí GPS sale según lo siguiente...por si alguno hay dispuesto a repetirla un fin de semana que tenga libre ;-).

http://connect.garmin.com/activity/366799339

miércoles, 31 de julio de 2013

Trail Römische Weinstrasse (Carretera Romana del Vino)

Como ya es tradición, el componente Alemán del Team BBQ este fin de semana pasado aprovechó una visita a sus tierras nativas para participar en una carrera. Lo que sigue es la crónica de una experiencia marcada por unas condiciones climáticas y una dureza de recorrido no muy comunes en Alemania.

En Alemania la escena de carreras ultra es más pequeña que en España y la gente se conoce. Así que hay muchas caras conocidas en la salida a las 7 de la mañana. Hay poco mas que 100 inscritos y dos equipos de relevo (detalle importante, como se podrá apreciar al final de esta crónica. El tema de conversación principal es el tiempo: Previsiones de de 36 grados y mucha humedad preocupan a esos corredores nórdicos. Yo en cambio estoy contento, ya que el calor me gusta y pienso que pueda tener cierta ventaja gracias a mi aclimatación en España.



A las 7 en punto (estamos en Alemania, no hay retrasos ;-)) se para la música típica que te hace pensar que vas a luchar en alguna batalla épica y comienza la cuenta atrás. Llegamos al cero y empiezo a correr a un ritmo suave. Parece que nadie tiene ganas y el resto me sigue a unos metros de distancia. Dentro del pueblo hay que seguir una bici hasta que empiezan la sendas y no veo razonable entrar primero en las sendas cerradas y abrir camino con los pros pisándome los talones. Así que freno y dejo pasar a los pocos que se animan a acelerar. Como suele ocurrir, sobre todo en Alemania, rápidamente me encuentro solo, detrás de un grupo que va muy en serio y con el pelotón un poco detrás. Se ve que voy "medio-serio".




La carrera consiste en una vuelta de 85km oficiales (88 y poco según el ultimo track que no he visto) alrededor del río Mosela, zona de cultivo de vino desde tiempos romanos. El río ha creado un valle profundo que permite trazar un recorrido exigente subiendo y bajando los dos lados varias veces. Mas bajo el terreno consiste en campos de viñedo muy inclinados y arriba en bosque profundo. Las carreras en Alemania fuera de los alpes suelen ser muy corribles, con alto porcentaje de senda, pero poco desnivel. Esta carrera es distinta en que busca los desniveles abruptos y el terreno medio-técnico. Hay que pasar por zonas aseguradas con cuerdas, cables y alguna sección con escaleras, tipo via ferata.




La primera parte hasta el CP1 en el KM20 es accesible y relativamente rápido, aunque ya se nota el calor y sobre todo la humedad. Me esfuerzo en comer muy pronto, pensando que en cualquier momento de la carrera mi estomago puede negarse por el calor y así pongo "calorías en el banco". En el CP cargo dos litros de agua, pillo algunas galletas saladas y continuo.

La siguiente sección es mas corta, pero cuenta con alguna dificultad en forma de desniveles abruptos. No hay ninguna subida muy larga durante toda la carrera, pero siempre se sube o se baja ... muy rompe-piernas. Empiezo a notar el calor y me refresco en cada fuente o riachuelo que encuentro. Aparece un avituallamiento inesperado de liquido. La organización ha decidido añadir avituallamientos extras  por el calor. Por una parte es una decisión acertada, teniendo en cuenta las condiciones extremas, pero por otra parte va a favor de los "minimalistas" que han decidido salir con un bidón de 330ml en la mano y nada mas. Yo opino que la previsión del tiempo estaba clara y voy cargado con mochila y mucha agua por eso. Pero reconozco que incluso con 2 litros los 20km entre controles se pueden hacer muy largos para los que van un poco mas lentos.

En el CP2 (KM36) veo gente retirándose. Me dicen que han pasado 29 corredores ya. Yo sigo a mi ritmo, no sin cargar de nuevo el agua a tope, ya que según la descripción del recorrido ahora viene una sección larga y delicada de 20KM sin avituallamiento. En esta sección me junto con un corredor majo (Marco) que me cuenta que aunque tiene bastante experiencia, ésta es la primera carrera de tanta distancia para él. Menudo día para iniciarse. Nuestro ritmo es muy parecido. Él me saca algo de ventaja en las subidas, pero en las bajadas siempre le pillo. Me espero el control en el KM56 y en el KM50 me doy cuenta que me queda poca agua. Sé que puedo aguantar bastante rato sin agua, ya que voy bien hidratado, pero no sin sufrir cierta perdida de rendimiento. Así que mentalmente paso un rato malo y Marco se me va. En el KM53 decido que necesito comer y me trago una barrita. Para ser capaz de dirigirla y evitar que se me cierre el estomago decido acabar el agua que me queda de golpe y me preparo a pasar sed, cuando mágicamente aparece el control un poco antes de los esperado. El timing no podría ser mejor. Cargo 2 litros de agua mezclada con bebida isotónica y sigo junto con Marco. Pasamos por tramos algo técnicos pero espectaculares con subidas y bajadas aseguradas con cables y cuerdas.

Del KM63 al 68 mas o menos hay la única subida relativamente larga, una pista con un desnivel suave en medio de un bosque bonito. Es perfectamente corrible, pero soy de la opinión que este tipo de subida es buen sitio para recuperarse y comer. Lo comentamos entre nosotros Marco y yo: Estamos andando a 8:30 min/km y corriendo cuesta arriba con mochila ahí igual haríamos 7:30, por lo cual son 5 minutos de diferencia que son buena inversión para el resto de la carrera.

En la siguiente bajada voy un poco mas rápido que Marco y no le vuelvo a ver hasta la meta. Viene "el muro", como lo llaman los organizadores, una subida brutal pero relativamente corta. Se ve que a todas la carreras les gusta tener un "muro" y al final nunca es para tanto. Aprovecho a mitad de la cuesta para parar y tumbarme en un riachuelo para bajar la temperatura corporal. En el control del KM71 me comentan que voy el 21, un hecho que despierta cierto instinto competitivo. Como me veo muy entero pienso en entrar en los top 20.

Asumo que quedan 14km y voy a un ritmo alegre pero sostenible. Pienso que para alguien me pille ahora, tiene que tener un día muy bueno y se merecería adelantarme. Adelanto a un corredor y en KM75 veo uno que se retira en un pueblo. Le pregunto si está seguro, ya que tiene 5 horas para hacer 10km y hasta puede tumbarse en la sombra comer y beber durante dos horas para recuperar y entonces acabar incluso andando. Pero ya se ha decidido y se marcha. Llego al KM80 y veo el pueblo donde está la meta. Y de repente oigo voces y me doy cuenta que tengo dos corredores que van a buen ritmo a 100m detrás de mi. No puede ser! Ahora no quiero perder mi puesto en los top 20 y acelero. Total, ya queda poco y habrá que acabar en sprint. Paso el KM83 y veo un avituallamiento sin personal (es decir han dejado agua para los corredores). Eso a 2km de meta no tiene sentido y me hace dudar. En efecto, el recorrido gira y volvemos a subir alejándonos del pueblo. Habrá mas distancia entonces. Luego me entero que había algunos cambios al recorrido de ultima hora y son 88KM oficiales (90 me saldrán en el GPS). No hay mas remedio que continuar. Estoy flipando con el ritmo que llevan mis dos perseguidores. Con mi estrategia de carrera conservadora y las buenas sensaciones debería ser yo el cazador.

Van pasando las ultimas subidas y bajadas y voy a un ritmo que no me creía posible al final de un ultra. En la entrada del pueblo adelanto a otro corredor, uno que va con zapatillas minimalistas. Demostrativamente piso un poco mas fuerte con mis Hokas al pasarle ;-) Ya estoy en el pueblo y sé que hay que cruzarlo para llegar a meta. Me giro y veo los dos pesados a 10m. ¿Como es posible? Mantengo el ritmo, quiero dejar algo para un sprint final si hace falta. Veo el arco y oigo pasos detrás. Ya me han pillado, pero después de haberme picado durante casi 10km no quiero ceder y hago un sprint a tope de 200m. Paso la meta delante de ellos por pocos segundos en 12 horas 58 minutos y me siento (mejor dicho me colapso) la primera vez en todo el día.

Me dicen dos cosas: primero que he llegado en el puesto 17, y segundo que los dos corredores que me han dado tanta guerra fueron uno que iba en la carrera de relevo y un acompañante "ilegal". Es decir solamente han hecho los últimos 15km y no competían conmigo. Bueno, por lo menos me han motivado bastante. Espero un poquito, veo a Marco también acabando en buen tiempo (se ve que se ha perdido un par de veces) y voy a casa de mis padres, para, como no puede ser de otra manera, participar en una barbacoa familiar.

Estoy muy contento con el desarrollo de la carrera. He hecho una carrera muy constante y he conseguido comer y beber bien  y así llegar con reservas. (9 barritas, 4 geles, varias galletas saladas + unos 12 litros de líquido en forma de agua, coca cola y isotónico).
Las buenas sensaciones me alegran aún mas, teniendo en cuenta las condiciones extremas. Al final hay solamente 58 finishers, 35 de ellos llegaron en el limite de tiempo original (la organización decidió ampliar el limite por las condiciones).

Como alegría adicional gano un fin de semana para dos personas en una bodega con cena y cata de vino incluido, por ser el corredor que desde mas lejos ha venido.

Material empleado: 
  • Zapatillas Hoka One One Stinton Evo
  • Camiseta RaidLight Ultralight
  • Pantalon corto Race Ready
  • Visera RaidLight
  • Pantorilleras Hoko
  • Mochila Ultimate Direction Highline
  • Calcetines Injinji Performance 2.0








miércoles, 3 de julio de 2013

Gran Trail de Peñalara 2013 - 110km. El trabajo bien hecho.


Y llegó el día del Gran Trail de Peñalara 110km. Otro ultra finalizado, y esta vez bastante contento, se nota el trabajo duro y los resultados que se obtienen. Este año repetía experiencia para sacarme un poco la espinita del año 2011, que si bien finalicé, no lo hice del todo contento...

En esta ocasión se salía a las 11am del viernes, a mi opinión, muy acertado, ya que evitaríamos el calor desde primeras horas y llegaríamos algo más frescos a la parte final. con ello, sobre las 19:30h llegamos a Navacerrada y rápidamente fuimos a recoger el dorsal, pasar por el stand de Raidlight y saludar al "sheriff" Sergio ;-) y a buscar un buen sitio donde poder cenar un plato de pasta con algo de pan y un bollo, para tener así energía suficiente para los primeros kilómetros de la prueba. Como todavía este año las temperaturas eran frescas por la noche estaba dudando en el material y ropa que portar, y hasta última hora no decidí en ponerme malla pirata para la noche y que luego en el punto intermedio me cambiaría a un pantalón corto más cómodo para mí. El resto de material bastante ligero, con la mochila Marco Olmo 5 (que gran acierto) y ropa térmica Hoko (otro gran acierto). Así ya decidido nos vamos a la parte de salida donde vemos gente conocida, entre ellos a Luis (del blog 100 kilómetros no son nada) y que parece que tenemos el mismo gusto en las carreras, ya que nos vemos en todas las que nos apuntamos. Con la entrada al recinto y control de material solo queda esperar a que den las 11am, el tiempo se hace lento, menos mal que el ambiente es bueno con mucha gente, música, animación...



...y así, casi sin quererlo, me despido de los míos hasta Rascafría (que calculo que sobre las 8am estaré allí [y acerté de pleno ;-)]) y se da la salida, como siempre, la gente corre que se las pela y en los primeros kilómetros paso a un montón de gente que ha salido disparada pero que en las primeras rampas se pone a caminar. De esta forma consigo adelantar a bastante gente que ya va con bastones desde los primeros kilómetros y así hacer más cómodo el paso por sendas estrechas y la subida a la Maliciosa que es bastante puñetera para subirla con los palos. De momento me encuentro cómodo y la primera subida, si bien es larga y con alguna rampita dura, no me cuesta mucho realizarla y llego sobre las 00:30am, y creo que llego en muy buena posición arriba donde me llevo los ánimos de Dani, otro miembro del Raidlight Team. Ahora con cautela ya que viene una bajada (que yo recordaba algo complicada pero no mucho), pero que con mi técnica :-(, la noche y los nervios de los participantes voy dejando paso mientras yo bajo casi andando. Se trata de al principio un descenso bastante técnico, luego algo más llevadero pero bastante engañoso para acabar en cómodas sendas hasta el avituallamiento del kilómetro 18, donde llego en unas 3h y poco.


Allí repongo fuerzas y salgo a por el siguiente pedazo, que para mí es el más "feo" de la carrera, donde una senda estrecha, con mucha vegetación, que a veces hay que separar, donde se enganchan los bastones a los altos ;-) y donde hay tener cuidado de no darse con ramas. De hecho, en la edición del 2011 me hice un corte del que conservo ya para mi historia una pequeña cicatriz ;-)...este pedazo lo realizó bastante cómodo en subida, pero la bajada de nuevo se torna algo complicada, con barro y alguna pérdida, hasta que por fin se sale a un camino algo roto y luego una senda que nos lleva al avituallamiento del kilómetro 28, donde llegó sobre las 4am.

De nuevo algo de comida, rellenar bidones y descanso y salgo presto a por la siguiente ascensión, el puerto de la Morcuera kilómetro 38 (supuestamente ;-) ), que es bastante llevadera y engañosa a la vez, con bastantes tramos para trotar pero en la que se debe regular, y esto hago. Exceptuando la parte final, todo es bastante ligero. Aquí me encuentro de cine y paso a bastante gente en las zonas de trote, consiguiendo llegar al alto justo a las 6:10am, tiempo donde paro algo a comer, a guardar el frontal y a ponerme algo de ropa, ya que ahora al amanecer hacer mucho más fresco (sobre 7ºC). Decido descansar unos minutos, porque se que queda una larga bajada corrible y en donde realizándola bien se puede ganar bastante tiempo.



Tras salir de la Morcuera hace fresco, pero gracias a la ropa y al trote comienzo a calentar y bajo muy bien a un buen ritmo trotón, comiendo y encontrándome muy bien, aunque las Saucony Xodus comienzan a molestarme algo de tanto trotar en la planta de los pies. La bajada al final se hace larga por el esfuerzo, aunque el paraje es precioso y más amaneciendo, viendo a la otra parte el imponente Peñalara con bastante neveros todavía...bonita estampa. Tras casi una hora y media de trote con alguna parada, llegamos puntuales a las 8am al polideportivo de Rascafría, kilómetro 53 donde allí estaban los míos. Aquí, paro a comer tranquilo un plato de pasta que me preparé, me cambio de ropa algo más fresca y renuevo mi kit de barritas y geles para el resto del camino ;-)...además aprovecho para vaciar el estómago y salir tranquilamente haciendo la digestión. Me despido de los míos de nuevo, que me siguen por todo el recorrido ahora hasta la Granja calculando que sobre las 14:30-15h estaría allí.




Del polideportivo salí a las 8:45am tranquilamente para que la comida se asiente algo en el estómago mientras encaro las primeras y más duras rampas del Reventón. Una vez hecho la digestión, justo en el momento en que se sale a la parte de pista del mismo, acelero algo el ritmo y llego relativamente rápido al punto de control del kilómetro 63 sobre las 10:20am. Allí de nuevo hay que tomar aire, comer algo y renovar agua (que hasta la Granja no tendremos) y vamos a la parte más técnica, senderos pedregosos que se pierden entre los collados, varías subidas y bajadas a collados y Peñalara al fondo que nunca llega...terreno incómodo pero el día es impresionantemente bueno, disfruto mucho del paisaje, todavía hay neveros y vamos a pasar por uno ;-). Por fin llego a la base de la Cresta de Claveles/Peñalara. Guardo los bastones porque hay trepadas, pasar entre lajas y canchales y los bastones molestan. Como no estoy muy acostumbrado a este tipo de zonas, el paso de la cresta lo hago con mucho cuidado, una mal apoyo puede ser fatal, y más a estas alturas que la musculatura ya no responde igual. De esta forma, llego al control pasadas las 12pm, pero sabiendo que voy bastante bien de piernas y de tiempo.



En esto llega otra bajada técnica, y aquí la primera me toca realizarla casi caminando, primero en un bonito canchal que machaca las piernas, y luego en una resbaladiza e inclinida bajada en zig-zag que me cuesta mucho rato realizar, pero tranquilo, hasta la llegada al Chozo. Aquí me noto las piernas algo cansadas de la bajada, pero ya es un terreno más favorable y me pongo a correr sin parar hasta la Granja, donde llego a las 14:20pm. Allí de nuevo paro algo, pero esta vez, con las prisas y viendo que podía hacer un buen tiempo, como poco y recargo rápido el agua y parto hacía el siguiente punto de control...grave error...

...grave error porque a esas horas el calor apretaba, y el siguiente tramo era en tendencia ligera hacía arriba, pero difícil de correr, sendero con escaleras, subiditas y bajadas, raíces...en el que al principio corro pero el Sol me machaca y me viene el bajón, ya que entramos en la cadena de calor, beber mucho, estómago lleno de agua, no querer comer, molestías...y este pedazo se me hace eterno, nunca parece llegar y como parece corrible en ciertas secciones aun me ahoga más...lo paso fatal. La Casa de la Pesca nunca llega uff!!...y encima antes de llegar al avitu un kilómetro y medio de asfalto que es ideal para los cuadriceps ;-). Menos mal que poco antes de las 5pm llego y allí me tumbo a beber agua y a comer todo lo que pueda, si bien poca gana tenía, se que debo hacerlo.



Tras reponerme un poco viene el pedazo de la famosa subida de la Fuenfría, que sin embargo, estaba deseando, ya que aunque vaya mal y sea dura, prefiero eso que ver el camino tipo de la Casa de la Pesca donde es más rompepiernas. Subo a relativamente buen ritmo y llego a las 6pm clavadas a la Fuenfría, allí otro trago de agua y en marcha...y de nuevo otro bajón, camino similar al anterior de la Casa de la Pesca, que es el camino Schmid, rompepiernas, puedes correr, pero hay raíces, escaleras, subidas y bajadas, y mina mucho la moral...para colmo, muchos paseantes que van a un ritmo parecido al tuyo ;-) y te desanima. A mitad de camino, para a comerme una barrita y estirar unos minutos y continúo...siento que voy a echar todo el trabajo a perder y que mi intención de llegar de día a la meta no va ser posible...

...pero al poco, consigo ver al final del camino a los míos y voilá...estamos en el puerto de Navacerrada, donde llego pasadas las 19:20pm, mucho tiempo pérdido en este último tramo. Aquí me siento a comer algo de nuevo y a darme ánimos que sólo quedan 10km!!!...y vaya, lo conseguí, salgo presto con algo ya de molestías en los cuadriceps pero poco a poco caliento y cuando corono el último puerto, me guardo los bastones y comienzo a trotar por la senda, con cuidado que es algo resbaladiza y los reflejos ya no son los mismos, hasta que tras unos largos kilómetros de senda aparezco en la pista final...serán sobre las 20:30pm y me dicen que quedan unos 5km!!...puede ser posible bajar de 22h!!...me tomo un gel...y algo ocurrió, de repente, me pongo por debajo de 5 minutos el kilómetro (el terreno es bastante favorable), tanto que me emparejo con un corredor de nombre Guille y que es un crack participante del GTP60, y que estuvimos hablando durante unos kilómetros pero el no puede seguir mi ritmo, yo voy ciego, estoy haciendo series un un ultra ;-)...entramos en el pueblo y me paso junto unos corredores el paso de cebra por donde debíamos cruzar, vuelta atrás, perdiendo unos minutos (me pego un bajón el pensar que no bajaba de 22h), pero sigo apretando hasta por una pequeñita cuesta que hay en el pueblo, voy volando...y allí estaba la meta, voy buscando a Amparo y no la veo...sí, está allí, saludo señalando el reloj y voilá...21:55,38!!!...finisher!!!...contento no, lo siguiente, para mí ese tiempo era sensacional (por lo que suelo perder en las bajadas y zonas técnicas)...como siempre agradeciendo a los míos estar ahí. No importa ahora caminar unos días como un robot...contento de que el trabajo de este año ha dado sus frutos, y esto se merece unas buenas cervezas ;-)...ahora a por la próxima!!!!











martes, 4 de junio de 2013

Trans Montesblancos Trail 50

Este sábado pasado nos fuimos a correr la Trans Montesblancos Trail  en la Puebla de Alfindén (Zaragoza), desarrollándose todo por la zona de los Monegros, un paisaje semi-desértico. Stefan fue el año pasado y a pesar de no poder haberla completado, sí quedó bastante sorprendido de la organización y la carrera, por lo que nos apuntamos este año nada más salir el plazo de inscripción.


Y así hicimos, salimos de Valencia sobre las 7 de la mañana y en algo más de 3h llegamos a la población. Como todavía era pronto, había poca gente y estaban montando toda la salida y zona de carrera. Nosotros recogimos el dorsal y nos dispusimos a comer tranquilamente, ya que la carrera salía a las 13h. La temperatura si bien no ser alta, debido al fuerte viento de Cierzo, sí se notaba en la piel como el Sol quemaba. Tras comer, fuimos a cambiarnos y prepararnos para la salida y apenas a 20m de la salida ya nos metimos dentro del área de control de la carrera, a esperar que esta se produjese. Como en la salida decidimos ir cada uno a su estrategía y forma de correr pues relataremos por separado como fue la aventura de ambos:

Juan Carlos:
La verdad es que la carrera me tenía algo intrigado, ya que este tipo de carreras "tan corribles" y sin avituallamientos sólidos no se me dan bien, ya que me ciego a correr y se me olvida comer y beber hasta que al final exploto (me va mejor carreras con más desnivel, donde se camina más y hay solido en los avitus), y como no, está tampoco iba a ser una excepción. La salida unos minutos pasados de las 13h se produce rápida. Como no exigían mucho material (algo de comida, móvil y depósito de agua) me noto muy ligero, este año he intentado mejorar velocidad y la verdad es que me encontraba cómodo.


Sin quererlo y sin apenas esfuerzo debo calcular que me encuentro sobre el puesto 20-25 de la carrera sin quererlo ni beberlo. Al ser todo camino y pista se puede correr fácil y los desniveles, salvo momentos puntuales, no son excesivos, aunque eso sí, a la larga desgastarán porque son bastante contínuos. Rápidamente llego al kilómetro 8 en unos 42 minutos, voy demasiado deprisa pienso, pero no me cuesta mucho llevar el ritmo que he adoptado y así sigo. No tengo nada de hambre, al revés, me noto algo hinchado (creo que comí bastante antes de salir también) y de momento sed no tengo, aunque el aire seco se que deshidrata más de lo que uno cree.


De nuevo me encuentro en un avitu del kilómetro 15 que se llega tras una larga y constante subida. Aquí para un poco a estirar mis piernas y bebo dos sorbos de agua, no me hace falta ni recargar los bidones. Tras la pausa, el terreno es en tendencia descendente otra vez hasta la salida completándose así un bucle. Aquí me encuentro fenomenal, y bajando le pego por fin dos bocados a una barrita, pero no tengo hambre y encima me compré por error el modelo más "seco" de estas barritas por lo que parece que estoy comiendo tierra, al menos me servirá para beber algo. A buen ritmo llego al kilómetro 25 en poco más de 2:08...muy rápido para lo que pensaba, pero que leches me encuentro fuerte. Aquí bebo algo más y recargo bidones y de nuevo a la marcha, a por el segundo bucle. En el cruce de caminos me encuentro a Stefan que baja también rápido, más o menos estará 2-3km por detras y unos 20 minutos de tiempo, se le ve fresco y con buena marcha. Yo sigo corriendo porque el cuerpo me responde, y eso que para mí esta era la sección más dura y engañosa, prácticamente 9 kilómetros en constante subida corrible, pero me voy manteniendo...sin embargo, más o menos sobre el kilómetro 34 comienzo a tener algo de dolor de estómago, no he comido nada y no tengo hambre, pero de golpe me empiezan a doler más las piernas, menos mal que en poco aparece otro avitu donde me tomo un gel y agua y estiro un poco. Salgo de ahí en tendencia bajada, pero no me encuentro bien y aunque corro, la cabeza me puede y creo que voy lento, el calor me invade y poco a poco cada vez de vez en cuando me dan algunas arcadas, pero no vómito. Se me hace muy largo y más cuando en el kilómetro 40 viene la sección más
complicada de cresteo por pequeñas colinas por senda, aquí llego en algo menos de 4h. Al menos, aquí se tiene que andar y viene bien para parar y cambiar el gesto de correr por el de andar. Aquí parece que me recupero algo, pero no...en la última subida antes del avitu tengo que parar por las arcadas que me dan, pero nada, no vomito, tengo agonía y me arrastro hasta el control del 44km.



Aquí pido una botella y me siento, intento beber y ver si me entran ganas de comer, pero nada, ni siquiera un gel...sin embargo pensar que me quedan 6km me hace salir convencido de un poco de sufrimiento y ya está...y que sufrimiento, un largo camino recto con subidas y bajadas y un fuerte viento de cierzo me matan, intento correr, pero al rato camino, me recupero, corro pero no me da para mucho y vuelvo a caminar...se me hace interminable, nunca llega el último kilómetro y cuando llega estoy en el pueblo pero nos meten por el interior y voy tan roto que hasta ese último kilómetro me toca andar un
pedazo...al final, saco fuerzas de flaqueza para entrar en meta trotando y ser finisher en 5:13,47. Uff, al parar me dolían todas las piernas como nunca, aun teniendo consumiciones pido un agua que no puedo ni abrir, no me entra nada, me siento a ver si puedo esperar a Stefan pero me duele todo y de nuevo arcadas...subo a ducharme y no puedo estar ni sentado ni de pie, dolor...y más arcadas, hasta que al final voy al W.C. y pude vomitar, que fuerte!. Me ducho a duras penas por el dolor de todo, y todavía sin beber ni comer...quiero salir a esperar a Stefan pero no puedo estar de pie, me voy a una grada a tumbarme y ver por fin si tengo ganas de beber y comer, pero no...poco a poco al menos el dolor
de piernas desaparece y en ese momento entre Stefan en meta y yo le envío un mensaje diciéndole donde estoy. Lleva dos coca-colas y me da una, que por fin, me la tomo...me sienta como algo divino y mientras se ducha, milagrosamente me recupero, no me duele nada, empiezo a tener hambre y ya estoy listo para conducir sin molestias ni dolores...en definitiva, tengo que aprender a comer y beber en este tipo de carreras, no es la primera vez que me pasa, y me temo que tampoco la última...sabiendo que puedo dar más de sí si llegara a controlar esto, pero siempre me vence.

Stefan:
Tenia muchas ganas de volver a la TMT, ya que el año pasado abandoné en el KM28, y encima por razones no justificables conmigo mismo (Crónica del año pasado). Este año me acerco con otra filosofía, la de centrarme en acabar y no preocuparme del ritmo de los otros. Y como plan de contingencia me llevo a Juan Carlos, que en caso de oir la palabra "abandonar" suele repartir patadas en el culo. ;-)

En la salida lo ultimo que escucho de J.C. es: "Uf, hoy no me apetece nada correr! Me lo voy a tomar con calma." Y con eso sale como una flecha y no le vuelvo a ver hasta el cruce a mitad de carrera cuando me lleva ya casi media hora de ventaja. Los ingleses llaman "sandbaging" a esta técnica de hacer sentirse seguro a la competencia ;-)

Nada, yo a mi ritmo, con el plan de siempre de ir constante, sin perder tiempo en paradas innecesarias y ser eficiente en los avituallamientos. En cambio al año pasado la temperatura es aceptable, pero hace mucho aire. Claro, por eso la temperatura es acceptable, no se puede  tener todo ;-).

La carrera es rápida en el sentido de que casi todo el recorrido es corrible, aunque probablemente para alguien de mi nivel tomar algún descanso para andar en algunas de la subidas podría ser mas eficiente. De todos modos el terreno me invita a correr por encima de mis posibilidades y al final me dejará bastante destrozado. Pero por el momento voy bien, intento beber con cierta frecuencia, pero cuando llego al primer avituallamientos me queda suficiente agua para no parar. Llevo dos bidones de mano, estilo americano, que es algo que va muy bien en este tipo de carrera. Llevo varios geles y 3 barritas, el móvil (material obligatorio) y un pequeño kit de emergencias (tiritas, ibuprofeno y Imodium, que nunca se sabe) en los bolsillos del pantalón y así no necesito mochila. 

Cuando se acaba la hora y media me obligo a tragarme una barrita, cosa que no apetece con el calor y el ritmo que llevo. En el KM 16 mas o menos se encuentra el segundo avituallamiento. Me queda poca agua, pero como es todo bajada hasta el pueblo, decido no parar y ir rápido y ligero. En esa bajada me cruzo con la cabeza de la carrera por un tramo que está compartido con el segundo bucle. Poco después veo a J.C. que está volando. 



Entro en el pueblo (KM25) en unos 2h20m, cargo agua y salgo enseguida. Ahora empiezo a sufrir en la larga subida hasta el KM 34 mas o menos. Me obligo a comer otra barrita. Será la ultima, a partir de ahora geles, que entran mejor. En el siguiente control cargo agua, aunque me queda bastante, porque, según el briefing, el terreno se complica a partir del KM40. Y así es, aunque la complicación me viene bien. Llevo las piernas dolorosas, el estomago me está causando problemas y tener que concentrarme en una senda algo más técnica me distrae. En esta sección disfruto mucho, se va por crestas subiendo y bajando hasta el famoso toro, simbolo de la carrera y de alguna casa de vinos de jerez ;-). 

De ahí se va a Alfajarín y como curiosidad bonita se entra por medio del castillo.  Como tengo uno de estos subidones de energía inesperadas que solamente existen mas alla del KM42, voy tan encerrado en "la zona" que no me doy cuenta del control hasta que ya lo he pasado. Tengo que volver algunos metros, porque sí que necesito cargar agua. 



El resto del recorrido son unos 5km en paralelo a la autovia con el aire de frente. Como los "subidones post maraton" nunca duran mucho, me viene el bajón correspondiente y sufro bastante.    No me importa e incluso cuando me toca andar un poquito estoy feliz, ya que sé que la meta está cerca y esta vez sí que voy a acabar. A 2km de la meta un par de corredores me adelantan y consiguen despertar mi espirito competitivo. Estamos luchando por los puesto 50 y tanto y no tiene mucho sentido, pero a veces picarse con alguien es necesario para la motivación. Les sigo un ratito hasta que me decido y intento hacer un adelantamiento de estos que te dejan sin palabras y sin opciones de seguir. Acelero y doy las ultimas reservas que me quedan. No me siguen, bien! Probablemente, ni se han dado cuenta que estamos compitiendo, pero que narices, es una carrera! Una pequeña victoria absurda para mi, jejeje. Giramos para entrar en el pueblo y nada mas fuera de vista freno y recojo mis pulmones del suelo. 

Ya no queda nada, entro en meta, en 5h40m, un hombre feliz. Recojo mi camiseta (muy chula por cierto) y mi trofeo de finisher en forma de toro. Me felicitan Hector y después Alfonso, los directores de la carrera. Voy por una Coca Cola y busco a J.C. No le encuentro, pero me llega un mensaje diciendo que está vomitando en los servicios del pabellón, así que pido otra Coca Cola para él y voy a asegurarme que mi conductor vuelve a estar en condiciones para llevarme a casa ;-)



Conclusión conjunta:

Tras acabar ambos la carrera y despedirnos de los organizadores, nos toca la vuelta. No podemos quedarnos para que no se nos haga muy tarde nuestra vuelta, así que emprendemos marcha hacia Valencia, parando cuando nos entra hambre en Calamocha...donde daremos cuenta de un segundo ultra ;-)...ya hemos recuperado lo perdido delante de una buena mesa...un rato más de coche y en nuestras casitas a dormir tranquilos.


En definitiva, lo que más impresiona de la carrera es la atención y detalles de la organización, muy recomendable en este sentido y que hacen que el corredor solo tenga que preocuparse de correr, que no es poco. Enhorabuena a todos!!!